1 Junio 2014 (El Día de la Añoranza)

                               Hola buenos días hoy Ines nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.

                               EL DÍA DE LA AÑORANZA.

                              Cada año en la tarde de las primeras vísperas de la Ascensión de Señor, en cuanto empezamos a cantar el himno: 
                               "no, Yo no dejo la tierra,
                                no Yo no olvido a los hombres
                               Aquí he dejado la guerra
                               arriba están vuestros nombres."

                              Me entra como un sentir de añoranza, es como esas palabras que sólo al pronunciarlas ya parecen representar lo que significan, cómo al decir guau ya parece que vemos al perro; pues así. Es como un sentido de presencia y ausencia a la vez que no sabes donde poner el corazón y, sin embargo, está, Jesús está siempre. 

                               La liturgia de hoy nos dice que se va al Cielo, Él mismo nos consuela y asegura que se va para "prepararnos sitió"el nuestro,el que desde que fuimos creados Ya estaba preparado. Jesús se ha Encarnado precisamente para ayudarnos a llegar ahí y después de enseñarnos el Camino: El mismo, inicia la marcha. No es de extrañar que hoy tengamos en el corazón una mezcla de alegría y añoranza; aquí encajan perfectamente todas nuestras ausencias y todas nuestras esperanzas , todos nuestros gozos y todos nuestros dolores, la Palabra nos dice:¿qué hacéis mirando al cielo sin alegría ? 

                              La Alegría es nuestro signo , nuestra esencia de cristianos (hace poco lo decía el Papa y lo repite siempre) ; es cierto que también sufrimos ,claro, pero el " secreto" no es poder ó saber ó tener fuerzas , no, es El ,Jesús, el Señor, el que "se lleva cautiva nuestra cautividad" , a Quien tenemos que entregar siempre y especialmente hoy nuestra mochila . En el oficio hemos cantado que :"se lleva cautiva nuestra cautividad" y es verdad . Por eso está fiesta es de la añoranza, porque en lo profundo de nuestro ser sabemos y sentimos que estamos hechos para el Cielo . 

                             Hoy el reto es que nos dejemos llevar de la certeza (sentida o no , sensiblemente) y que contagiemos a los que aún, No pueden reconocer el privilegio de se amados personalmente por Cristo, compartamos nuestra Esperanza de llegar al Cielo y reunirnos totalmente con los que amamos y nos han precedido. FELIZ DÍA.

¡VIVE DE CRISTO!

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