Últimamente muchas son las madres que nos dicen que se reúnen para orar por sus hijos, que se los entregan a Cristo para que El les cuide y vele por ellos en esos momentos o circunstancias en los que su libertad es protagonista y ellos pasan a "segundo plano" . Y es que, ayer una madre me decía que se sentía culpable por que quizá no habían sabido estar en los momentos en que sus hijos les necesitaban, se hacía responsable del intinerario por el que habían pasado, pensaba en sus posibles fallos, sus descuidos, que ya no había marcha atras... Me impactó lo que me dijo y me sirvió de oración.
Cuántas veces nos responsabilizamos y culpabilizamos por los actos de aquellos que más queremos y examinamos nuestro papel en sus vidas cuando algo no sale bien "si le hubiese dicho..." "¿y si no he hecho suficiente?" "quizá no he sabido..." "no me he enterado...." "no he estado..." "si pudiese empezar de nuevo..." Incluso en el presente nos hacemos responsables de otros "estoy a su lado, con el tiempo cambiará".
Creo que de una manera o otra todos nos vemos reflejados en nuestro papel de hijos, padres, amigos, hermanos, esposos, novios... la vida en muchos momentos da una fuerte sacudida y nos hace enfrentarnos a estos sentimientos. Pero Cristo no te ha pedido que seas perfecto, que salves a nadie, sabe que eres limitado. Sólo te pide que ames, que vivas del Amor y que le entregues esa persona que El te acaba de poner en el corazón,es lo más grande que puedes hacer. La libertad del otro choca con nuestros deseos de Felicidad para ellos, la libertad hace que la persona en ocasiones tome el camino equivocado ¿y tu? ora y ama, no te exijas lo que sólo Cristo puede hacer, no hipoteques tu vida intentando hacer lo que solo El puede.
Hoy el reto del Amor es entregar a Cristo a esa persona por la que tanto sufres o has sufrido, a tus hijos que un día volarán, a tus padres con sus limitaciones, a tus hermanos con su caracter, pidele que actúe en ellos, da cabida a la libertad del otro.
Descansa en El. " Dios escribe sobre renglones torcidos".
¡VIVE DE CRISTO!
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