Hoy el reto del Amor es buscar cobertura.
A todo el mundo le ha pasado alguna vez que, de pronto, te quedas sin cobertura, y te pones a caminar un poco, o lo elevas a ver si la recuperas; otros hacen con el móvil una especie de movimiento como el signo de infinito, y dicen que les funciona...da igual, el caso es recuperarla, no se puede estar sin cobertura, no sea que entre algo, o que tengo que llamar.
Y esque el otro día me salió decirme a mi misma está expresión: "necesito recobrar la cobertura".
Sentía como cierta pesadez, dolor de piernas y eso producía en mi una cierta pereza por cualquier cosa. Todo me costaba, era como imposible que algo me moviera a hacer nada.
Soy una persona que tiende a tranquilorra. Lo reconozco, una de mis mayores pobrezas es la pereza, a veces me llaman 'pachoncín'.
Y, claro está, cuando yo me veo con esos síntomas se que es lo que necesito: 'recobrar la cobertura'. De toda la vida se ha dicho que contra la pereza diligencia, pero mi experiencia con esta pobreza es que contra la pereza: Cristo. Sólo estando con Él, volviéndome a Él, pasando un rato y volviendo a reconocerle como Señor de mi vida, sólo así, buscando volver a tener cobertura con Cristo, experimento que Él me mueve, que nunca salgo igual que entré.
Todos tenemos, vemos y escuchamos signos suficientes para saber por dónde va el Señor, o que nos quiere indicar. Uno que es común a todos es La Paz. Si algo no te da Paz, es que no está el Señor ahí. Pero luego hay otro signos ya personales de cada uno y que poco a poco vamos observando en uno mismo para aprender a reconocerle (como en mi caso es la pereza).
Actualmente mi alerta de 'necesitas cobertura' es la pereza, porque me recuerda que tengo necesidad de cobertura, que tengo necesidad de ir a Él, y por eso hoy puedo decir 'gracias, Señor, por mi pereza'.
Y tu, seguro que se te va la cobertura, ¿te has planteado recuperarla? No tengas miedo a ser pobre, eso te recuerda continuamente que necesitas a Alguien que pueda mover lo inamovible, que haga en ti lo que tu no puedes.
¡VIVE DE CRISTO!
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