CORCHO CUARESMAL
Ayer, como todos los días, después del desayuno Lety repartió las tareas del día. A mí me encargó decorar un corcho. Durante la Cuaresma queremos poner en él el Evangelio del día, y cada una tiene que ir clavando un papelito “de cuatro líneas de cosecha propia; no vale copiar a san Agustín, ¿eh?"
Lo cierto es que a mí el tema de preparar corchos nunca ha sido mi deporte favorito, pero, seamos sinceros. Preparar un corcho de Cuaresma es coser y cantar. Total, con poner un par de chinchetas para los papelitos...
Debieron de leerme el pensamiento, porque inmediatamente Israel comentó entre bromas:
-A ver que corcho nos vas a poner...
-Sí -añadió riendo Julia- que tenga colores y esas cosas...
-¿Colores? -respondí- ¿Pero no se supone que estamos en Cuaresma?
Todas se echaron a reír. Y, a vueltas con el corcho, empezamos a hablar de la Cuaresma, de que se nos hacía un poco difícil vivir este tono tan morado, ¡cuando sabemos que todo termina estupendamente!
Y así surgió el tema para la clase de por la tarde. ¿Como vivir de Cristo estos cuarenta días?
Lety nos explicó que la Cuaresma es un medio, no un fin; que es sólo el camino, no la meta. Nos dijo que todo lo que nos propone la Iglesia para este tiempo tiene un único objetivo: centrarnos en Cristo. Es un tiempo para ir a lo esencial, para volver a decir “todo menos perder a Jesucristo". Estos días nos invitan a pararnos y a echar un vistazo un poco más a fondo a los contadores de amor que tenemos en el corazón. Y, como en toda revisión, si hay alguna avería, es el momento perfecto para que ponerla delante del Especialista en Reparaciones: Jesús. Y de su mano, puedes ir experimentando cómo va sanando y resucitando tu corazón. ¡Así andamos este camino mirando hacia la Pascua! Y, esa gran noche, podrás cantar: “¡Yo también he resucitado!"
Evidentemente, después esta clase mi concepto del corcho cambió bastante... Imágenes chulas, rotuladores de colores... ¡todo preparado para este camino a la resurrección!
Hoy el reto del amor es vivir el día con los pies en la Cuaresma y los ojos en Pascua. Cristo esta deseando poner a punto tu corazón, llenarlo de su amor y ternura. Ponlo en sus manos... ¡y deja que vaya haciendo sus reparaciones! ¿Preparado para hoy caminar con él amando a tope? ¡Feliz día cuaresmal! ;)
Lo cierto es que a mí el tema de preparar corchos nunca ha sido mi deporte favorito, pero, seamos sinceros. Preparar un corcho de Cuaresma es coser y cantar. Total, con poner un par de chinchetas para los papelitos...
Debieron de leerme el pensamiento, porque inmediatamente Israel comentó entre bromas:
-A ver que corcho nos vas a poner...
-Sí -añadió riendo Julia- que tenga colores y esas cosas...
-¿Colores? -respondí- ¿Pero no se supone que estamos en Cuaresma?
Todas se echaron a reír. Y, a vueltas con el corcho, empezamos a hablar de la Cuaresma, de que se nos hacía un poco difícil vivir este tono tan morado, ¡cuando sabemos que todo termina estupendamente!
Y así surgió el tema para la clase de por la tarde. ¿Como vivir de Cristo estos cuarenta días?
Lety nos explicó que la Cuaresma es un medio, no un fin; que es sólo el camino, no la meta. Nos dijo que todo lo que nos propone la Iglesia para este tiempo tiene un único objetivo: centrarnos en Cristo. Es un tiempo para ir a lo esencial, para volver a decir “todo menos perder a Jesucristo". Estos días nos invitan a pararnos y a echar un vistazo un poco más a fondo a los contadores de amor que tenemos en el corazón. Y, como en toda revisión, si hay alguna avería, es el momento perfecto para que ponerla delante del Especialista en Reparaciones: Jesús. Y de su mano, puedes ir experimentando cómo va sanando y resucitando tu corazón. ¡Así andamos este camino mirando hacia la Pascua! Y, esa gran noche, podrás cantar: “¡Yo también he resucitado!"
Evidentemente, después esta clase mi concepto del corcho cambió bastante... Imágenes chulas, rotuladores de colores... ¡todo preparado para este camino a la resurrección!
Hoy el reto del amor es vivir el día con los pies en la Cuaresma y los ojos en Pascua. Cristo esta deseando poner a punto tu corazón, llenarlo de su amor y ternura. Ponlo en sus manos... ¡y deja que vaya haciendo sus reparaciones! ¿Preparado para hoy caminar con él amando a tope? ¡Feliz día cuaresmal! ;)
¡VIVE DE CRISTO!
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